El campamento romano

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campamento, Cardus, castra, Decumanus, Defensa, Escipión, Girona, Muralla, Praetorium, Titulum

El campamento romano, también denominado castra se conforma como la base del sistema de dominación territorial que este pueblo realizó. Las legiones que estaban realizando campañas, tras cumplir la marcha diaria, enviaban exploradores para encontrar un lugar apropiado donde pernoctar. Cuando dicho lugar era encontrado, los soldados de Roma se disponían a construir allí una estructura defensiva. Muy propio de los tiempos de la república. Una vez el lugar se elegía se plantaba una bandera blanca en el punto central, donde se establecería el praetorium, donde se asentaría el cónsul, posteriormente donde pasarían la noche los oficiales y legionarios se establecía con banderas rojas y usualmente era cerca del cónsul. Tras esto se utilizaba groma para indicar las principales vías y a 400 metros del praetorium se establecían las empalizadas. La forma del campamento era rectangular, a pesar de que la distribución interna presenta una planta irregular. Ante la empalizada de madera había un foso que era excavado por las legiones, tras el foso se encontraba la Berma, un espacio plano que precedía el agger, un terraplén. Si el campamento fuera a tener un carácter ocasional, como he planteado para pernoctar por ejemplo, las edificaciones se realizaban en madera, mientras que si iba a tener un carácter más duradero la empalizada se fortificaba con pequeñas torres o se construía en piedra, como es el caso del campamento que se construyó en Emporion con el desembarco romano en la península ibérica por parte de los Escipiones Cneo y Publio. La extensión de los campamentos de las legiones abarca entre las 14 y las 50 hectáreas, en cambio las de tropas auxiliares eran de entre 2 y 4 hectáreas.

El campamento constaba de dos calles principales, la “vía principal” se establecía en el eje norte-sur, y la vía decumana que era un eje de este a oeste. El campamento tenía usualmente cuatro puertas denominadas: Praetoria, decumana, principalis dextra y principalis sinistra. Para defender estos puntos estratégicos se colocaban torres a cada lado, se podía colocar también un titulum, un obstáculo frente a la puerta para impedir el uso de arietes directamente contra ella. Destacan dentro del campamento romano una serie de edificios que son comunes, como nos narra Julio César en la guerra de las Galias, encontramos el principia, edificio donde se depositaban las insignias militares, así como el pago para la soldada y los suministros. Las armas se guardaban en la armamentaria. En algunos campamentos como es el caso del de Tarraco, encontramos un pequeño templo. El triclinium  del que hablé anteriormente era la residencia del cónsul, usualmente era una tienda mayor que el resto, pero excepcionalmente contaba con triclinium o comedor. Los alimentos se guardaban junto al principia donde se ubicaban también los valetudinarium. Los soldados cuando se encontraban en el campamento usaban como habitáculos unos barracones, cada barracón estaba diseñado para una centuria. Junto a estos edificios con una lógica mucho más militar encontramos también carpinterías, herrerías, baños y letrinas que contaban con una función plenamente logística.

Fuentes:

Julio César, Comentarios a la guerra de las Galias, VII, LXIII, 2-9

Polibio, Historias, XXXV, I

Polibio, Historias, VI, LXI

Quesada Sanz, F(2008): Armas de Grecia y Roma: forjaron la Historia de la Antigüedad clásica. Madrid, la esfera de los libros.